lunes, 1 de abril de 2013

mi buen amigo

Hace muchos años, ya más de 5 si no me equivoco, es que conversaba contigo mi buen amigo. 

En momentos que que la realidad presionaba incansablemente arruinando mi concentración profunda del devenir de mi propio presente y futuro atormentándome con absurdas frustraciones, que para el mal de males, siempre se iban acumulando exponencialmente con el paso del tiempo. 

Pero al final mi buen amigo siempre estabas para escuchar mis estupideces y alardes, mis locuras y peticiones contractuales que perfectamente sabes que nos beneficiarían mutuamente mejorando nuestra calidad de vida, o mi buen amigo, tantas cosas que podríamos lograr juntos, tantos aspectos que podríamos controlar y dominar de forma arbitraria degustando el placer de la curiosidad de manejar nuestras vidas de una manera ilimitada, abstrayendonos  de las patéticas reglas del resto de los vivos.

Pero here we are, enfrentando un penoso estudio de toda una materia construida sobre las nubes del ocio, tratando de mentirte a ti mismo de que algunos aspectos de ella te gustan, para repetir con suerte una décima parte de ella frente a 5 personas, no eres ni más ni menos abogado por dar el grado. 

Que batalla más absurda es la que nos toca dar mi buen amigo, una batalla por no decirle patética  que simplemente constituye un trámite, para talvez, lograr aspirar a algo más siguiendo las actuales reglas del juego social del nivel de los mortales.

But in the end i chose this side...

Tratemos de burlarnos en su cara de tal minia y vaga batalla, cumplamos juntos el paso por este accidente de nuestras vidas, y puede ser que juntos superemos el plano normal y encontremos un tipo de destino que se encuentre por sobre lo que normalmente se espera.



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